TRADICIONES Y COSTUMBRES

MERCADO MEDIEVAL DE BALMASEDA 

Los ya pasados 14 y 15 de mayo, Balmaseda celebró la 13ª edición de su, ya conocidísimo Mercado Medieval. Un mercado medieval que comenzó su andadura en 1999 para conmemorar el octavo centenario de la fundación de Balmaseda como villa; la primera del territorio que hoy es Bizkaia.

Este Mercado Medieval se celebra a lo largo de un fin de semana. En el podemos encontrar actuaciones callejeras para todos los gustos y edades (música, teatros, espectáculos pirotécnicos, guiñoles, animales, equilibristas, faquir….), actividades y más de un centenar de puestos de artesanos y mercaderes, donde poder adquirir productos como bisutería, cristalería, libros, pieles, cerámicas, juguetes, inciensos, jabones, etc. Y consumir los maravillosos productos de la tierra, tales como el Txakoli bizkaino, talos con chorizo, quesos…. O los traídos de tierras más lejanas como los kebab o el Cous-Cous.

El Mercado Medieval de Balmaseda es especial (en opinión de muchos de los artistas y mercaderes que dedican su vida a estos eventos, uno de los mejores, si no el mejor, y en el que más venden sus productos).

Las calles del casco histórico de la villa se engalanan para la ocasión, los vecinos y vecinas se visten con ropas de la época para dar colorido y alegría y el visitante se siente como si estuviera en el mismísimo Medievo.

 

Todas las ediciones del Mercado comienzan con una representación popular en la que participan unos 300 vecinos y vecinas, mostrando un hecho acaecido en la historia de la villa. Cada edición se representa un pasaje diferente.

pequeño fragmento de la primera edición

Tras finalizar la representación se da la bienvenida a los visitantes y se abre oficialmente el mercado, invitando a la gente a dejarse llevar por los aromas y la algarabía del lugar.

Esta edición de 2011 ha contado con un nuevo espectáculo, un Torneo Medieval en el que varios caballeros realizan pruebas de fuerza y habilidad a lomos de sus corceles, para posteriormente, justar entre sí; primero a caballo y después a píe.

Es por ello que se trata de un evento muy recomendable y que ya está dentro de la larga lista de tradiciones de la villa de Balmaseda.