La comarca goza de un espectacular
paisaje conjuntado con arquitectura típica de la zona y una especial
gastronomía.
Es posible realizar rutas por varios
Senderos o callejear por sus pueblos, así como visitar cuevas con
pinturas rupestres que han sido declaradas Patrimonio de la
Humanidad por la UNESCO (Cueva del Castillo, De las Monedas, Sopeña),
pero si hay un elemento característico de los Valles Pasiegos, son
sus cabañas.
Construidas para la explotación de la
ganadería pasiega, de carácter trashumante. Las familias ganaderas
debían trasladarse en busca de pastos para los animales y por eso
edificaban estas cabañas en diferentes puntos de los valles, para
hacer más fácil su labor.
Son sencillas, construidas en piedra
para soportar las condiciones climatologías de la zona y dotadas de
dos plantas; la inferior destinada a los animales y la superior a las
personas.